A finales de 2013 mi hijo William me convenció para que empezara un blog. Will quería aprender a programar en Internet, yo tenía un montón de material y parecía una buena forma de ordenarlo y tenerlo para el recuerdo.

Y así empezó todo, poco podía esperar que 7 años después aún seguiría subiendo posts (ya voy por cerca de 500), habría superado el millón de visualizaciones y lo habrían leído 400.000 personas. No soy nada tecnológico y por eso me parece una brutalidad.

Crear contenido para el blog da trabajo, también he contestado más de 3000 comentarios, aunque tampoco me obsesiono y sólo subo cosas cuando me apetece o creo que es un contenido que puede interesar. Pero tiene grandes recompensas.

Alucino viendo el mapa de los países desde donde se ha visualizado lo que he publicado, ¡todo el mundo!!. Eso me ha permitido conocer a gente durante mis viajes, que me han invitado o yo a ellos a nuestras casas, nos hemos encontrado en reuniones moteras o simplemente en una salida entre amigos. Es genial!.

Coloreados los países desde donde se ha visto el blog. Ya solo queda Groenlandia y algún país de Africa central!

Por otra parte me ha ayudado a conseguir la atención de marcas que me han apoyado en mis locos proyectos. Tras esas empresas hay apasionados por su trabajo, por las motos, con los que ha sido muy fácil conectar y a los que creo que también he podido ayudar con mis pruebas y sugerencias de mejora. Gracias a todos ellos!

Bien utilizado, Internet es una herramienta potentísima que nos acerca, que nos reúne alrededor de nuestra pasión y que permite relaciones lejanas que serían imposibles antes de que existiera. Por eso mantener el blog creo que vale la pena… y así seguiré mientras os sirva y me divierta.

Gracias por seguirlo, por seguirme y ojalá nos encontremos por los caminos… o por la red.

GAAASSS!!