Comprar una camper es una inversión importante en la que intervienen muchos factores. Aún soy muy novato en todo este mundo inacabable de las camper y por tanto no voy a dar lecciones pero puedo compartir nuestro proceso -que será muy similar al de cualquier otro que se la quiera comprar- las dudas, los aciertos y también los errores que vamos cometiendo. Espero que pueda ser útil para los que se inicien en este mundo.

En los posts anteriores del apartado Camper de este blog he ido explicando cómo nos decidimos primero por la VW Rockton y ahora por la MAN TGE así que no voy a repetirme.

Con la VW tomamos la decisión que consideramos más acertada en su momento pero por culpa del covid nuestra situación personal ha cambiado tanto y en tan poco tiempo que la que parecía la furgo de nuestros sueños dejó de serlo en sólo un año. Aquí lo explico.

Os aseguro que no fue una compra impulsiva, le dimos muchas vueltas pero es evidente que por mucho que queramos planificar a veces las cosas no salen según lo previsto.

Pero eso no ha de ser así siempre y hay una serie de aspectos fundamentales que deberían ser suficientes para minimizar los riesgos de una equivocación que puede salir muy cara.

¿ALQUILAR O COMPRAR?

Creo que es muy recomendable alquilar antes de comprar. Todos tenemos idealizado lo que es viajar en autocaravana, es muy gratificante pero no es oro todo lo que reluce.

No todo el mundo se adapta a vivir en un espacio tan pequeño, a mover las cosas de un sitio a otro cada vez que vas a comer o dormir, a buscar un sitio tranquilo donde pernoctar, a dormir en un lugar solitario… La idea romántica de salir de casa con todo puesto no es del todo cierta. Siempre hay una preparación previa al viaje (comida, agua, ropa…) y un mantenimiento posterior cuando se llega (limpieza, combustibles, etc.). Y desde luego está el aspecto económico: por el precio y el mantenimiento de una camper se puede ir a hoteles caros durante muchos años.

Por este motivo nosotros alquilamos campers de diferentes tamaños antes de decidirnos a comprar y lo hicimos cuando estuvimos seguros de que nos gustaba viajar así.

Por tanto recomiendo alquilar antes de comprar, no sólo te vas a ahorrar una fuerte inversión, también el mantenimiento, seguros, impuestos, un sitio donde guardarla… Y si realmente te gusta siempre estarás a tiempo de comprar pero con una experiencia previa que te ayudará a escoger la camper más adecuada.

La Barretina, la alquilamos en un fantástico viaje a los Alpes

DECIDIR EL TAMAÑO DE LA FURGONETA

  1. FURGONETA PEQUEÑA: Si vas a usar la furgoneta en el día a día, para ir a trabajar, a hacer recados pero también los fines de semana y las vacaciones lo ideal es una furgo pequeña o mediana. En nuestro caso escogimos la VW T6 pero hay otras similares en el mercado igualmente válidas. Aquí explicaba porqué me decidí por este tamaño en su momento. Este tipo de furgoneta es muy ágil (casi como un coche), gasta menos que una grande y se puede meter en la mayoría de aparcamientos. Por contra su reducido espacio interior hace que difícilmente puedan tener baño y que para dormir o comer sea necesario un proceso que puede acabar haciéndose tedioso si se pasan largas temporadas en ellas.
Nuestra Rockton en el Salón del caravaning

2. GRAN VOLUMEN: La gran mayoría de estas furgonetas se utilizan exclusivamente para el ocio. Su mayor tamaño y una altura suficiente para caminar en su interior las hacen mucho más cómodas que las anteriores, pueden tener baños completos y no hace falta montar ni desmontar nada para comer o dormir. Además cuentan con buenos maleteros para poder llevar todo el material de tus hobbies. Por contra son menos ágiles, su tamaño limita el paso por calles o caminos estrechos, gastan más y no pueden meterse en los parkings. Aquí explicaba las diferentes opciones que estuvimos barajando.

En nuestro caso hemos pasado de querer una furgo para todo (la T6) a una sólo para ocio (la MAN). Lo que más me preocupa en este caso son las limitaciones que tendré con ella al meterme por pistas, pueblos o ciudades. Recuerdo cuando alquilé una Sprinter 4×4 y me costó pasar por algunos sitios. Espero acostumbrarme, lo que está claro es que se gana en algunas cosas pero se pierde en otras. Espero que no nos arrepintamos del cambio.

Ok, sigamos con el proceso. Ya hemos alquilado, hemos visto que tamaño nos conviene y decidimos comprar. La siguiente decisión es:

¿NUEVA O DE SEGUNDA MANO?

En el caso de las camper pequeñas que también se van a usar en el día a día creo que se justifica mejor la inversión de un vehículo nuevo ya que se va a aprovechar más. Eso es lo que pensé al comprar la VW. Pero quizás por eso a los fabricantes se les va la mano y las ponen a precios de coches de lujo, casi siempre son más caras que las furgos grandes. Incomprensible. Esto hace que también las de segunda mano tengan precios desorbitados y aún así se vendan rápidamente.

Cuesta más justificar la compra de una camper grande nueva que sólo se va a usar para ocio, algunos fines de semana y en vacaciones. El problema al comprar un vehículo usado en el que se vive dentro es que hay muchos componentes a los que muchas veces no se les realiza el debido mantenimiento y que son difíciles de comprobar antes de la compra. Por tanto hay que ver si se va a utilizar mucho y si se realizarán viajes largos que justifiquen la inversión a cambio de la tranquilidad que da un vehículo nuevo.

Luego están las furgonetas vacías para camperizar. Creo que sólo es justificable su compra de segunda mano si se sabe muy bien de donde procede o se va a hacer una camperización económica. Cuando veo las furgonetas de reparto cargadas a tope y llevadas todo el día gas a fondo… no querría gastarme mucho dinero equipando a una de esas.

LA CAMPERIZACIÓN:

El siguiente paso es la camperización. Tanto si la furgo es grande como si es pequeña hay tres opciones: comprarla camperizada de fábrica, camperizarla uno mismo, o acudir a un camperizador. Evidentemente el presupuesto será un factor decisivo para tomar la decisión.

  1. FURGO CAMPERIZADA DE FÁBRICA: Es la opción más fácil. Hay una gama inmensa de furgonetas camper de todos los tamaños, opciones y precios. En este caso se ve y se toca lo que se compra, se ven los acabados y hay pocas sorpresas… normalmente ya que hay camperizaciones de fábrica muy deficientes en todo lo que no se vé: aislamientos, instalaciones, anclajes… Tampoco se pueden escoger demasiado los materiales, ni las características de la furgo. Diríamos que tendremos una furgo funcional pero con poca personalidad.
  2. CAMPERIZARLA UNO MISMO: Creo que es el sueño de cualquiera que quiera una camper. Permite personalizar absolutamente cada componente, cada detalle. Hacerlo uno mismo ha de satisfacer enormemente, sin duda sería mi opción preferida y la más económica pero hay que saber hacerlo, tener las herramientas, el tiempo y el espacio…. desgraciadamente no cumplo ninguno de los requisitos. He visto auténticas maravillas hechas por el mismo dueño… y también chapuzas infumables. Además hay que tener en cuenta que es un vehículo que ha de circular y por tanto ha de cumplir con homologaciones de todos sus componentes. En definitiva, la cosa es seria y hay que saber lo que se hace. Hay quien la va construyendo poco a poco, lo que va muy bien para ir definiendo las necesidades y adaptar el proyecto a los recursos financieros del momento. En este caso hay que hacer una buena planificación para no tener que estar desmontando y modificando lo que se haya hecho antes. Complicado.
  3. LLEVARLA A UN CAMPERIZADOR: En función del camperizador al que se acuda (los hay más flexibles/artesanos que otros) puede llegar a ser una opción similar a la anterior en cuanto a las posibilidades de personalización de la furgo. Se pierde el encanto de hacerla uno mismo y lógicamente sale más caro pero da la tranquilidad de estar en manos de profesionales que te pueden asesorar y que tienen experiencia en lo que hacen. De todas formas hay que seleccionar cuidadosamente la empresa, con el boom de las camper han salido camperizadores de debajo de las piedras y no siempre cumplen con los requisitos de calidad que prometen. Hay que estar muy atento a las calidades de los materiales que se utilizan, los componentes y todo lo que no se vé para no tener desagradables sorpresas en forma de ruidos, filtraciones, malos aislamientos o humedades. Es la opción que hemos escogido nosotros. Eso nos ha permitido escoger la furgo de base que queríamos, con todas las especificaciones y accesorios, a partir de aquí toca decidir quién nos la camperiza, en eso estamos.

EQUIPAMIENTO Y DISTRIBUCIÓN INTERIOR:

Para decidir el equipamiento y como hacemos la distribución interior de la furgo hay que tener claro que vamos a hacer con ella.

  • Cuantos vamos a viajar y dormir: Eso definirá el número de asientos y de camas. En las gran volumen también será importante por tema de pesos y homologaciones, cada vez más restrictivas en este aspecto.
  • Como serán nuestros viajes: Si vamos a estar muchos días estacionados o nos moveremos mucho, si viajaremos por zonas remotas o muy civilizadas, iremos a campings o nos gusta la acampada libre… todos estos aspectos van a definir nuestras necesidades en cuanto a baterías, placas solares y componentes eléctricos, gas, capacidad de agua… y presupuesto.
  • Cómo nos gusta viajar: Hay muchos tipo de viajeros. En la escala básica estarían los jóvenes que pueden viajar únicamente con una mochila, a los que una furgo donde dormir les es suficiente y tienen espaldas flexibles como para no tener necesidad de un techo elevable para estar de pie. A éstos les bastará con una furgo pequeña con una equipación básica y seguramente se harán ellos los muebles. En el otro extremo estarían los mayores que, ya retirados, se pasarán semanas viajando por el mundo pero quieren hacerlo con la comodidad de una buena cama, cocina equipada y sobre todo un baño completo. Además no quieren romperse la espalda desplegando asientos o mesas y por tanto necesitarán una furgo grande y bien equipada. Entre estos dos extremos hay diversidad de usuarios. Decide dónde te posicionas y que requisitos mínimos le pides a tu furgo. Pero no olvides que los años pasan y nos vamos haciendo más comodones!!.
  • Hobbies: Normalmente viajaremos con nuestras chuches encima, bicicletas, motos, tablas de surf, de snow, esquís… hay que pensar como los transportamos.
  • 4×4: Lo overlander está de moda pero hay que intentar no dejarse influenciar por ello. Una furgo no es un 4×4 y tiene muchas limitaciones. Además el equipamiento offroad es caro y pesado lo que influye en el tema de homologaciones por peso e incrementa el precio y el consumo de la furgo. Por tanto hay que estar seguro de que vamos a utilizar el 4×4 antes de meterse en caras instalaciones.
¿Cuántos de nosotros aprovecharemos una preparación 4×4 así?

La forma y tamaño de la furgo va a ser decisiva de cara a la distribución interior de la camper. Por ejemplo: El gran éxito de las Fiat Ducato en el mundo camper es debido fundamentalmente a la forma de su caja, es más ancha que las otras y eso permite colocar la cama transversalmente sin necesidad de las típicas ampliaciones en los laterales necesarias en furgos más estrechas. Además mientras que otras furgonetas se van haciendo más estrechas en la zona alta de la caja, la Ducato es casi cuadrada y por tanto es factible poner literas o camas elevables eléctricamente.

La Ducato de Furgo K

Desgraciadamente todos los modelos 4×4 son del tipo de caja estrecha. Mercedes Sprinter, VW Crafter o Man TGE, todas tienen cajas similares más difíciles de camperizar.

Lógicamente la longitud y altura de la furgo nos dará más o menos espacio y comodidad interior a cambio de ser más o menos maniobrables. El tamaño vendrá definido por la definición de las necesidades que he descrito antes.

En nuestra camper anterior priorizamos la agilidad ya que la queríamos usar en el día a día. En la que hemos comprado ahora buscamos un compromiso que nos permita ir más cómodos sin perder excesivamente la maniobrabilidad.

NUESTRO CASO COMO EJEMPLO:

Cuantos vamos a viajar y dormir: Iremos dos personas. Por lo tanto podríamos tener sólo dos asientos y una cama doble. Pero eso es limitarlo mucho si, por ejemplo, un día quiere venir alguno de mis hijos. Por lo tanto vamos a poner un asiento doble en la zona del comedor con lo que podremos viajar 4.

El número de plazas influye en el tema de pesos. Actualmente (las normas van cambiando) el peso máximo para conducir una furgo sin necesidad del carnet de camión son 3.500kg. Por tanto hay que ir con mucho cuidado para no exceder este peso o sacarse el carnet de camionero. Si se homologa para 4 personas se está añadiendo peso (si no recuerdo mal son 75 o 80 kgs por persona) y será a costa de equipamiento para no sobrepasarlo.

Respecto a dormir, la MAN es de esas furgonetas estrechas en las que si se ponen literas la de arriba es sólo para personas bajas o niños. Como que no creemos que sea frecuente que viajemos tres buscaremos una solución eventual, aún no lo tenemos resuelto pero no ha de condicionar el resto de la distribución.

Cómo serán nuestros viajes: Nuestra intención es la de poder pasar largas temporadas en la furgo. En cuanto el virus nos deje querremos hacer viajes de varias semanas. No descartamos ir por Marruecos o zonas poco pobladas.

Con la Rockton pudimos acampar en sitios solitarios y preciosos, intentaremos hacer lo mismo con la nueva furgo. En lo posible evitamos los campings por lo que tenemos que ser bastante autosuficientes respecto a la capacidad de agua y electricidad (placas solares y baterías). Esto influye también en la calefacción y agua caliente que han de ser más dependientes del gasoil de la furgo que del gas.

Cómo nos gusta viajar: Estamos cerca del grupo de personas mayores que se pueden pasar muchos días en la camper y que buscan comodidad. Ya hemos tenido una furgo pequeña, tiene muchas ventajas pero queremos baño y nos cansa tener que levantar el techo, hacer la cama, montar y desmontar la mesa (espaldas poco flexibles 😉 )… Por eso nos quedamos una furgo larga (6m), lo suficientemente alta como para estar de pie y que permita tenerlo todo montado: mesas, cama, cocina…

Hobbies:

Moto: Llevarla dentro de la furgo parece imposible sin condicionar totalmente la distribución interior. Haría falta una furgo más larga y no quiero pasar de los 6 metros. Por tanto la opción puede ser el remolque que ya tengo o una plataforma para llevarla colgada detrás. Me gusta más la plataforma pero no creo que pueda por tema peso.

Me encanta llevar mis motos a cuestas… podré con la furgo?

E-bike: Puede ir también en el exterior pero me da terror la idea de dejar la furgo aparcada con mi joya al alcance de cualquiera así que haré lo posible para poder meterla en el maletero.

El resto de cosas serán las típicas que sólo necesitan suficiente potencia eléctrica para cargar sus baterías.

4×4: Al final he sucumbido al encanto del 4×4. Estuve a punto de desestimarlo pero nos encantó la experiencia con la Rockton. Nos gusta mucho la montaña y acampar en sitios poco accesibles y solitarios es fantástico. Espero atreverme a meterme con esa furgo grande.

Pero eso tiene sus consecuencias. Una furgo 4×4 es más pesada que una de dos ruedas motrices así que habrá que ser muy cuidadosos con el peso de la camperización para no exceder de los 3500 kgs.

Espero no haberme dejado nada, si es así agradeceré cualquier aportación que también me ayudará a mí en los siguientes pasos a seguir.

En este momento estamos en pleno proceso de selección del camperizador, viendo presupuestos, concretando instalaciones y la distribución de espacios… ¡apasionante!!

Sistemas de calefacción, placas solares, electrodomésticos, agua caliente, materiales… hay mucho que decidir y pocos conocimientos al respecto. En el próximo capítulo os iré explicando como va evolucionando el proyecto.

La MAN camperizada por Norantz tiene una pintaza!