No soy un tipo con un gran espíritu navideño pero si por algo me gustan estas fiestas es porque sirven para reunir las familias.
Mis hijos ya son mayores y tienen sus propias vidas, además William, el mediano, vive en Inglaterra. Por eso nos vemos menos y es más difícil que coincidamos todos, pero en Navidad no suele fallar que lo consigamos. Este año no ha sido la excepción.
Más difícil aún es que tenga tres motos en el garaje, y por eso no podíamos desaprovechar la oportunidad. Ha sido la primera vez que hemos podido ir los tres juntos y nos lo pasamos en grande. Incluso tuvimos nuestra cuota de liada al encontrarnos un árbol caído en el camino. Pero el team von Arend supera cualquier obstáculo!! 😀
Lógicamente aprovechamos para una buena dosis de postureo para el recuerdo, nunca se sabe cuando podremos volver a montar juntos.
Por cierto, a pesar de que van bien poco en moto, tela como van los angelitos… como se notan los años que pasaron practicando trial en bici para coger técnica. Incluso Alex, el mayor, se atrevió a dar saltos con la Ducati!!
Y yo… padre orgullosísimo!! 😀
Bonitas fotos; gran diversion en familia.
Fue fantástico, lástima que no tengamos más ocasiones. Gracias!
se me han saltado las lágrimas ¡¡ de lo mejor del mundo andar en moto con tus hijos. Enhorabuena.
Gracias!!
Enhorabuena Jaime, todo un lujo poder compartir afición con los hijos.
V’ss
Javier
Así es. Hasta ahora había podido salir con uno de ellos, nunca con los dos a la vez.
Gracias!!
Fantásticos momentos. Me alegro mucho de que los hayáis pasado juntos, espero que se repita lo antes posible. Un saludo.
Gracias!! Ojalá sea así pero de momento que nos quiten lo bailao ?