Hace unos días Motos Ausió organizo una jornada para probar la nueva WR 250 de Yamaha en el Circuit Verd de Moià.
Me apetecía mucho probar la nueva WR que supone un gran cambio respecto al modelo anterior. Toda la moto es nueva pero el cambio más visible es el motor con cilindro girado estrenado en la YZ de cross y que tan buenos resultados está dando. Además nunca había podido rodar en el Circuit verd lo que era un aliciente más. Son unas instalaciones muy buenas donde hay un circuito de moto cross y otros dedicados al enduro y el trial, un paraíso para ir en moto de montaña sin miedo a que te multen.
Como siempre, la gente de Ausió había hecho un gran despliegue de medios, con el impresionante camión que llevan a las carreras, todo su equipo y tres WR para probar: dos 250 y una 450.
Habían marcado un circuito muy variado para que las más de 50 personas que se habían inscrito pudieran probar las motos. Ausió invitaba además a un buen almuerzo y a que se pudiera rodar por el circuito con la moto de cada uno.
Llegué temprano con la Sherco y me disponía a dar unas vueltas al circuito de cross cuando Gaizka, el mecánico que va a las carreras con Ausió me dijo si quería ir con el a dar una vuelta. Gaizka es un vasco al que le gusta el enduro extremo y conoce bien el Circuit ya que ha participado en el Nirvarna Xtreme que se celebra allí. No podía pasar nada bueno…
El de la derecha es el vasco sádico
Como veréis en el vídeo me pegó un buen meneo enlazando trialera tras trialera siguiendo el recorrido de la Nirvarna, el tío está hecho un toro, no se cansa nunca!!. Cuando más satisfecho estaba de mi mismo, pensando que una extrema no podía conmigo, llegamos a un riachuelo con piedras enormes, mojadas y donde no te aguantabas ni de pie: el inferno. Así le llaman los organizadores de la Nirvarna. No me extraña que los que han participado en ella lo teman, ¡un verdadero infierno!!.
Yo llegué allí ya «blandito» y unos trialeros que estaban entrenando allí nos dijeron que era muy largo. Tras caminar un rato sin ver el final le dije a Gaizka que podia llamarme nenaza y lo que quisiera pero que yo daba la vuelta. Meterse allí era ir a romperlo todo, estos de las extremas están como una cabra o odian a sus motos. Con la de trial me lo habría pasado bien pero en con una enduro en la que casi no llego al suelo y con esos neumáticos… El problema es que volver atrás no era un regalito, teníamos que volver a pasar por un buen trecho de senderos embarrados que nos hicieron sudar tinta.
Llegué al punto de salida con el tiempo justo para poder dar un par de vueltas con la WR250. Me sorprendió. La verdad es que una 250 4t no me motivaba mucho, las que había probado hasta ahora me habían parecido un poco sosas y faltas de chicha pero esta es otra cosa. Ese motor va redondo, sube de vueltas como un tiro y se estira un montón.
La moto es un juguete y se lleva muy bien. Creo que es ideal para la mayoría de los endureros ya que tiene la potencia necesaria para ir a fondo sin sobresaltos. La justa y necesaria, se puede ir muy pero que muy rápido. Espero que Ausió me deje una un día para hacer una salida larga por los sitios que conozco y hacer una buena prueba.
Cuando acabé me cambié y me quedé a comer con mucha gente conocida que estaba por allí. El ambiente era fantástico. Me quedé un rato embobado viendo a los de cross saltando las mesetas del circuito, que fácil parecía!!
Total que tras la comida, descansar un rato y una llamada de diplomacia a casa pidiendo permiso (mi mujer es una santa!!) me volví a cambiar. Había que aprovechar el día!!
Como que era la hora de comer era el momento ideal para dar unas vueltas discretas sin hacer demasiado el ridículo así que lo aproveché… que desastre. Los saltos me parecían enormes (nunca antes había rodado en un circuito de cross), la moto empezaba a elevarse pero como que no llevaba suficiente velocidad no llegaba a la recepción por lo que la caída era mucho más dura. Nada, que no es lo mío, a ver si algún día encuentro a alguien que me enseñe a saltar.
Por suerte Gaizka estaba por allí y nos volvimos a liar a hacer trialeras que en eso me defiendo mejor. Esta era una zona más seca y se me dio bien, muy divertido.
Así quedó el equipo y el pobre casco que ahora ya sí pide la jubilación
Al final un día completo que me pasó factura al día siguiente en forma de agujetas por todo el cuerpo… casi dos meses sin ir en moto, las Navidades y el trote que me pegué… era de esperar!!
Aquí os pongo unos vídeos que espero os gusten
Probando la WR250 2015
Bienvenidos al infierno
Una vuelta al circuit verd y algunas trialeras
El punto de arriba es Gaika tirando de su moto…
Jaja, el Gaizka no sabía con quien se metía… lo llevabas «axfisiao» jajaja
Qué bien suena esa 4t, y no se te daba nada mal.
Alucino con los parajes que tenéis por allí.
Y con las actividades que organiza Ausió. Ya podría aprender el de aquí.
Bueno, lo que te digo siempre. Sigue así; no cambies.
Un abrazo, campeón
Asfixiao iba yo!! el tan pancho jajaja
Si, ese motorcito es una maravilla, la verdad es que para hacer enduro los mortales no hace falta más.
Somos muy afortunados, la montaña que nos rodea es preciosa.
Un abrazo Javier!
Próximo reto, el infierno con la ternera, jeje.
Noooooo!!! 😀