Hace unos días publiqué que voy a poder cumplir un sueño: cruzar USA de sur a norte visitando un montón de sitios preciosos.

Quedaba por saber con que moto lo iba hacer realidad. Lógicamente tenía que estar a la altura del viaje. Y lo está, vaya si lo está: ¡será una fabulosa Ducati Multistrada Enduro!!

El año pasado Ducati Ibérica me dejó una de estas joyas durante casi medio año. La relación con Pablo Silván, su responsable de marketing fue muy fácil y directa, muy natural. Y parece que a él también le gustó lo que hice con ella: una prueba a fondo que dejó claro que la bicha es dura de verdad. Lo cierto es que para mí fueron unos meses de disfrute máximo.

Para un viaje así que combinará asfalto y tierra y donde necesitaré capacidad de carga y comodidad para hacer muchos kilómetros la Multi Enduro es la moto perfecta. Así que cuando vi que tenía la oportunidad de hacerlo pensé inmediatamente en ella. Por probar no perdía nada, llamé a Pablo, le expliqué lo que tenía en mente ¡y me dijo que adelante!! 

Por tanto en mayo me voy a USA con una Ducati Multistrada Enduro, pero no con una Enduro cualquiera sino con la nueva Enduro Pro. Más no se puede pedir.

Ayer la fui a buscar a Ducati Barcelona. Es preciosísima. En cada semáforo había alguien que se giraba para verla, el gasolinero preguntandome detalles… incluso un tío con una Harley me iba haciendo señas con el pulgar hacia arriba mientras íbamos en paralelo por una calle de Barcelona! 😀

No hay grandes diferencias respecto a la Enduro que disfruté y de la que hablé largo y tendido en este apartado del blog. Básicamente es la misma moto con accesorios adicionales que la hacen aún más aventurera: defensas laterales, un escape Termignoni que suena a música celestial, luces anti niebla que complementan a las impresionantes luces full led (se hace de día, son mejores que las de un coche, y con cuneteros y todo!!), cúpula baja, un bonito color arena con un tacto rugoso original y que parece muy resistente… y a partir de aquí todo el arsenal tecnológico que ya tiene la Multi Enduro «normal» y que no es poco.

Curiosamente, y a diferencia de lo que me pasó la primera vez que me subí a una de estas italianas, en parado no me pareció tan grande. Viniendo de la 990, donde apenas llego al suelo, el asiento más bajo de la Multi me da confianza. Ya en marcha la moto es más fácil de llevar. Las ruedas de menor diámetro y la suspensión regulable electrónicamente hacen que en asfalto sea más estable y vaya sobre raíles. Además la respuesta del motor más suave (en modo touring) y todas las ayudas electrónicas que tiene hacen que por carretera sea una moto muy segura, cómoda y fácil de llevar. Eso si, si le buscas las cosquillas y haces salir el monstruo… agárrate fuerte, se convierte en una super bike con la que puedes fundir todos los radares.

En el camino de vuelta a casa volví a recordar viejas y agradables sensaciones. Enseguida me sentí acoplado y a gusto en ella y es que pasé grandes momentos con su roja hermana, nos lo vamos a pasar bien, muy bien 😉

Dentro de unos días tendré que volver a Ducati Barcelona para que me instalen el resto de accesorios que necesitaré para el viaje: maletas, bolsa sobre depósito, GPS… todo lo necesario para el gran viaje. Y es que ya van quedando menos días y hay mucho por preparar, hacer el rodaje a la moto, el equipaje, la ruta… aún no he salido y ya me lo estoy pasando en grande.

En el próximo post espero poder detallaros la ruta que haré, la tengo bastante definida a pesar de que la quiero dejar abierta para ir improvisando. Tengo que hacerlo así ya que no hay día en que no encuentre algo interesante para ir a ver o una pista fabulosa que no me quiero perder. 

Mientras tanto me cuesta irme del garaje… 😀